¿Qué son los intervalos aumentados, disminuidos y perfectos?

Si has leído el artículo sobre grados musicales, recordarás que mencionamos únicamente las 7 notas de la música occidental (C, D, E, F, G, A, B). Pero surge una pregunta: ¿cómo referimos a las demás notas (C#, D#, F#, G#, A#) usando la misma lógica de grados? Para entenderlo, vamos a profundizar un poco más:

La primera nota, como ya sabemos, corresponde al primer grado. Este también puede denominarse primer grado mayor. Tomemos el do (C) como ejemplo de este primer grado.

En este contexto, el re (D) es el segundo grado, también conocido como segundo grado mayor. Por su parte, el do sostenido (C# o Db) es el segundo grado menor. Estos términos, “segundo grado menor” y “segundo grado mayor”, suelen abreviarse simplemente a “segundo mayor” y “segundo menor”. Esta clasificación se aplica igualmente a los otros grados mayores y menores. La razón de estas denominaciones (“mayor” y “menor”) es indicar si el intervalo musical (la distancia entre las notas) es más largo o más corto.

Los intervalos mayores son extensos, mientras que los menores son más breves. Por ejemplo, en el caso anterior, el “segundo grado mayor” corresponde a un intervalo de un tono completo (ya que D está a dos semitonos de C), y el “segundo grado menor” a un intervalo de medio tono (D bemol está a un semitono de C). Estas denominaciones sirven para describir la distancia entre las notas.

Extendiendo este concepto a todas las notas, partiendo de C, obtenemos lo siguiente:

intervalos menores, mayores, perfectos

Es posible que te preguntes por qué existen las categorías de intervalos “aumentado”, “perfecto” y “disminuido”. Es importante saber que estas son simplemente definiciones utilizadas en el lenguaje de la teoría musical, comunes en cualquier texto educativo o cancionero.

La lógica detrás de estas denominaciones es similar a la de “mayor” y “menor”. “Aumentado” se refiere a un intervalo aún más largo y “disminuido” a uno más corto. Por su parte, “perfecto” se sitúa en un punto intermedio entre ambos.

Pero, ¿no podríamos simplemente usar “mayor” y “menor” para todas las notas, en lugar de “disminuido”, “aumentado” y “perfecto”? La respuesta es sí, pero pronto descubrirás que, en temas más avanzados, estas categorías adicionales son de gran utilidad. Por el momento, basta con familiarizarte con estos términos y su significado. Como puedes ver, no hay ningún misterio: son simplemente nombres asignados a distancias musicales específicas.

Ahora vamos a practicar esta nomenclatura partiendo de notas distintas a C, utilizando exclusivamente notas con sostenido:

todos los grados e intervalos

A partir del séptimo grado, las notas empiezan a repetirse, ya que el octavo grado es igual al primero. Siguiendo esta lógica:

  • El noveno grado es equivalente al segundo.
  • El undécimo grado corresponde al cuarto.
  • El decimotercer grado es igual al sexto.

Te estarás preguntando: si después del séptimo grado las notas se repiten, ¿por qué entonces se utilizan las denominaciones noveno, undécimo y decimotercero?

La razón es que algunos músicos prefieren estos grados para especificar la octava que se debe utilizar. Por ejemplo, si ves la notación Cm6 en un acorde, probablemente formarás el acorde de Do menor con el sexto grado más cercano para obtener Cm6. Sin embargo, si ves Cm13, entenderás que debes usar el sexto grado una octava más arriba, no el más cercano. La única diferencia entre estos dos acordes es un matiz sonoro debido a la octava empleada para el sexto grado (en futuros temas, abordaremos todo lo que necesitas saber sobre acordes y sus notaciones, no te preocupes si este ejemplo no te queda claro aún).

En el caso de la extensión del noveno, casi siempre se presenta una octava más arriba, de ahí que se prefiera al segundo. Pero no te sorprendas si ves el número 2 en algunas notaciones de acordes, especialmente en las estadounidenses, donde es común usar el 2 en lugar del 9.

Conocer estos detalles es crucial para no tener dudas sobre estas nomenclaturas.

Ahora, veamos la utilidad práctica de esta notación que acabamos de explicar.

Aplicación del concepto

Podemos referirnos a cualquier nota basándonos en una de referencia, tal como hicimos en el artículo «¿Qué son los grados?«. Seguiremos el mismo principio que en ese artículo, solo que ahora estamos ampliando el tema.

Anteriormente, trabajamos con la escala de Do mayor, y al hablar de «tercer grado», «sexto grado», etc., no especificábamos si el grado era mayor, menor, perfecto, disminuido o aumentado. Por eso era necesario aclarar que los grados se referían a la escala mayor. Ahora no será necesario vincularlos a una escala específica, ya que cada grado se especificará de forma independiente. A continuación, algunos ejemplos (ejercicios):

  • Tercer grado menor de C: Mi bemol
  • Séptimo grado menor de G: Fa
  • Segundo grado menor de D: Mi bemol
  • Quinta aumentada de C: Sol sostenido
  • Cuarta perfecta (o cuarto grado) desde A: Re
  • Quinta disminuida de B: Fa

Puedes verificar estas respuestas con la tabla que mostramos antes.

Nota: ¡Por ahora, solo estamos hablando de notas, no de acordes! Las denominaciones «aumentado» y «disminuido», así como «mayor» y «menor», también se aplican a los acordes, ¡pero ese es un tema diferente! Cuidado con no confundir los conceptos, aquí solo hablamos de notas y su nomenclatura individual. Cuando se trata de acordes, la nomenclatura cumple otra función. Por eso es importante hacer esta distinción. Recuérdalo.

Ir a: Octava

Volver a: Módulo 2